Río de Janeiro se convierte en el epicentro global de la innovación tecnológica con la celebración de la Web Summit, uno de los mayores eventos tecnológicos del mundo. Durante tres días, más de 600 oradores, creadores y directores de más de 1.000 startups se reúnen en la “Davos de los geeks” para discutir los impactos de la inteligencia artificial, el papel de la tecnología en los derechos humanos y el cambio climático.
La alcaldía de la ciudad estima que 40.000 personas asistirán diariamente al evento, que inyectará unos 33 millones de reales (6,4 millones de dólares) en la economía local. El alcalde Eduardo Paes destacó que la misión es convertir a Río en la capital de la innovación de América Latina, y la Web Summit es una parte fundamental de ese objetivo.
Este año, la conferencia se centra en el papel crucial de la tecnología para abordar cuestiones globales, y se destaca por la alta representatividad femenina, con el 45% de las empresas emergentes lideradas por mujeres.
La Web Summit en Río atrae a gigantes tecnológicos como IBM, BYD, Salesforce, Huawei y JP Morgan, así como a startups de todo el mundo. Los conferencistas incluyen desde jóvenes activistas indígenas hasta líderes en fintech, inteligencia artificial e influencers, junto con el legendario músico brasileño Gilberto Gil.
El evento se desarrolla en un contexto de debate sobre la regulación de las redes sociales en Brasil, tras las recientes declaraciones del magnate Elon Musk. La Web Summit, que solía celebrarse en Dublín y luego en Lisboa, se trasladó a Río el año pasado y continuará al menos hasta 2028, consolidando a la ciudad como un centro tecnológico global.
Paddy Cosgrave, cofundador de la Web Summit, destacó el espíritu de comunidad del evento y su capacidad para catalizar avances tecnológicos y relaciones significativas en la industria.
