Belice, a menudo considerado un tesoro oculto en Centroamérica y el Caribe, se presenta como un destino turístico único y fascinante. Con menos de 23,000 kilómetros cuadrados, este país anglófono se destaca por su diversidad, desde playas de arenas blancas hasta yacimientos arqueológicos mayas, selvas con jaguares, ríos y la impresionante barrera de coral mesoamericana, la segunda más grande del mundo.
A pesar de su proximidad a excepcionales destinos turísticos en México y Guatemala, Belice ha estado fuera del foco del turismo sudamericano, pero ha capturado la atención de visitantes norteamericanos y europeos. Con poco más de 400,000 habitantes, Belice se ha convertido en un crisol de culturas, influenciado por la historia maya, la conquista española, la colonización británica y su independencia en 1981.
La Embajada del Reino Unido y el Conflicto Fronterizo El país ha estado en el centro de la atención recientemente debido al conflicto fronterizo con Guatemala, que se remonta a la “traición” del Reino Unido, llevando a tensiones entre ambas naciones.
Principales Atractivos de Belice:
Cultura y Gente:
La cultura maya impregna Belice, desde comunidades como San Antonio, que luchan por preservar tradiciones y lengua, hasta la vibrante cultura garífuna en Hopkins, con danzas, tambores y cocina tradicional.
A pesar de su tamaño, Belice ofrece una experiencia turística poco masiva y natural, donde la riqueza cultural y los atractivos naturales aguardan ser descubiertos. El país espera aprovechar eventos como la Cata de Ron en Bélgica para promover su oferta exportable y expandir su presencia en el escenario internacional del turismo.