El bitcóin (BTC) arrancó octubre con un repunte sólido, al subir 2.6 % en 24 horas y superar momentáneamente los $121,086, antes de estabilizarse en torno a los $120,000. La escalada responde a una mezcla de factores macroeconómicos, técnicos y de mayor demanda institucional.

El cierre parcial de la economía en Estados Unidos generó una mayor búsqueda de activos de cobertura, mientras crece la expectativa de que la Reserva Federal recorte sus tasas este mes debido a la presión fiscal y la desaceleración económica. Esa perspectiva ha favorecido a BTC como refugio y activo de rentabilidad en un entorno de liquidez más amplia.

El impulso también provino de los ETF al contado de bitcoin, que recibieron entradas netas por $2,400 millones en la última semana, compensando ventas de grandes tenedores que movieron más de 12,000 BTC a exchanges, la mayor cifra desde noviembre de 2024.

A este panorama se suma el atractivo comparativo frente al oro y la expectativa de que los bancos centrales continúen expandiendo liquidez, lo que refuerza a BTC frente a las monedas fiduciarias. Además, octubre históricamente se ha mostrado favorable para el mercado cripto: desde 2013, el mes ha cerrado en positivo la mayoría de veces, con un rendimiento promedio cercano al 22 %, fenómeno conocido como “Uptober”.

En este contexto, El Salvador también resalta por su estrategia de acumulación de bitcoin. Actualmente el país posee 6,338 BTC, equivalentes a unos $764 millones, cifra cercana a su máximo histórico de $778 millones alcanzado el 13 de agosto. Solo en septiembre adquirió 51 BTC, incluidos 21 durante el tercer aniversario de la Ley Bitcoin, y en la última semana sumó 7 más, manteniendo la política de compras diarias anunciada por el presidente Nayib Bukele.

Desde 2022, la inversión total ronda los $300.5 millones, con una ganancia no realizada estimada en $454.6 millones, según datos de DropsTab.