Miércoles 26 de marzo de 2025
Las acciones de Boeing enfrentan una caída abrupta del 8.6% en las operaciones previas a la apertura del mercado, equivalente a una pérdida de casi US$13,000 millones en su valor bursátil. Este desplome surge luego de un incidente impactante en un vuelo de Alaska Airlines, donde un fragmento del fuselaje de un Boeing 737 Max 9 se desprendió en pleno vuelo, llevando a un aterrizaje de emergencia.
La Administración Federal de Aviación (FAA) ha ordenado la inmovilización de todos los Boeing 737 Max 9, afectando a 171 aviones en todo el mundo. Este incidente, el último en una serie de problemas para Boeing desde la inmovilización del 737 Max en 2019, ha generado preocupaciones sobre la reputación y el impacto financiero de la empresa.
Expertos sugieren que Boeing podría enfrentar demandas y compensaciones a las aerolíneas por ingresos perdidos. Las pérdidas financieras ya eran evidentes en los informes anuales de la compañía, registrando pérdidas consecutivas desde 2019. A pesar de la recuperación post-pandemia, las acciones de Boeing aún no han alcanzado los niveles anteriores, mientras que su rival, Airbus, ha superado sus máximos pre-pandemia.