Domingo 23 de marzo de 2025
El Gobierno de Brasil redujo su previsión de crecimiento económico para 2025 al 2,3%, afectado por el endurecimiento de la política monetaria en curso. Además, elevó su proyección de inflación al 4,8%, por encima del 3,6% estimado en noviembre, aunque mantiene un escenario más optimista que el del mercado.
Según la Secretaría de Política Económica del Ministerio de Hacienda, la inflación se verá influenciada por los efectos de la depreciación de la moneda y la inercia inflacionaria. La meta oficial del país es un 3% de inflación, con un margen de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales, lo que implicaría que Brasil supere el límite superior por segundo año consecutivo. En 2024, la inflación cerró en 4,83%.
Los economistas del sector privado, encuestados por el Banco Central, proyectan un crecimiento del PIB del 2,03% y una inflación del 5,58%, cifras menos optimistas que las del Gobierno.
El presidente del Banco Central, Gabriel Galipolo, afirmó que se tomarán el tiempo necesario para evaluar si la desaceleración económica es suficiente para contener la inflación.