Los precios del petróleo experimentaron una acelerada caída el martes, impulsada por temores de un exceso de aprovisionamiento de crudo y preocupaciones sobre las perspectivas económicas globales. Hacia las 17H00 GMT, el precio del barril de Brent del Mar del Norte para entrega en febrero experimentó una pérdida del 3.68%, situándose en $73.23, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) para entrega en enero descendió un 3.84%, alcanzando los $68.58.
Estas dos referencias mundiales de crudo alcanzaron sus niveles más bajos desde finales de junio, evidenciando la presión actual en los mercados petroleros. Datos de la agencia Bloomberg revelaron que la media semanal de las exportaciones de crudo de Rusia alcanzó niveles no vistos desde principios de julio, contribuyendo a la preocupación por el exceso de oferta.
James Harte, analista de Tickmill, señaló que, junto con la persistente producción elevada en Estados Unidos y las inquietudes sobre la salud económica de China, las perspectivas de la demanda a corto plazo parecen inciertas. Desde sus niveles máximos alcanzados a finales de septiembre, los precios del petróleo han experimentado una disminución entre el 25% y el 28%, cuando el Brent rozó los 100 dólares por barril.