El Salvador celebra la quinta quincena consecutiva de disminuciones en los precios de los combustibles, según datos de la Dirección General de Energía de Hidrocarburos y Minas (DGEHM). Desde el 16 de octubre pasado, la cadena de reducciones ha acumulado un impacto positivo de aproximadamente un dólar tanto en las gasolinas como en el diésel.
Las cinco quincenas de rebajas continuas equivalen a un ahorro de $0.93 por galón en el caso de la gasolina especial, $0.87 para la gasolina regular y una baja de $0.85 en el diésel.
El presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, destacó la importancia de estos valores acumulados y subrayó que las instituciones gubernamentales mantienen una estrecha vigilancia para garantizar que las reducciones se trasladen de manera inmediata a la población.
Salazar enfatizó que, dado que El Salvador importa el 100% de los combustibles que consume, el Gobierno está concentrando sus esfuerzos en acciones de verificación para proteger a la población. En colaboración con la DGEHM, se han llevado a cabo más de 16,000 verificaciones en gasolineras, asegurando la precisión en precios, cantidad, calidad y aspectos de seguridad.
Los precios actuales de referencia, reportados por la DGEHM para la quincena del 11 al 25 de diciembre, son los siguientes: la gasolina especial se sitúa en $3.82 en la zona central, $3.83 en la occidental y $3.86 en la oriental. Por su parte, la gasolina regular tiene un costo de $3.70 en la zona central, $3.71 en la occidental y $3.74 en la oriental. El diésel se comercializa a $3.79 en el centro del país, $3.80 en el occidente y $3.83 en el oriente salvadoreño.
Estos precios están vinculados a los recortes voluntarios para el primer trimestre de 2024 realizados por los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). La baja en el precio local también se ha visto influida por el aumento en las reservas de gasolinas y diésel en la última quincena, según lo informado por la Agencia Internacional de Energía (AIE), así como por las disminuciones en la demanda de Estados Unidos y China, generando una caída en los precios de los derivados del petróleo en el mercado internacional.
