La economía mexicana experimentó una desaceleración al cierre de 2023, evidenciada por el modesto crecimiento del 0.06% registrado en diciembre, según el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE).
Este resultado refleja la debilidad en las actividades industriales y en los sectores relacionados con el consumo, atribuida en parte a la escasa dinámica generada por las festividades decembrinas.
El informe del IOAE revela que este modesto crecimiento sigue a dos meses de contracción en octubre y noviembre, con un promedio trimestral de retroceso del 0.13%.
Factores como la falta de impulso en la demanda interna, posiblemente influenciada por el huracán Otis en Acapulco, han contribuido a esta desaceleración.
Por segmentos económicos, las actividades secundarias mostraron un leve aumento del 0.08% en diciembre, mientras las terciarias experimentaron un incremento del 0.03%.
Sin embargo, la crisis en la manufactura mexicana, afectada por la debilidad en Estados Unidos y el resto del mundo, ha impactado negativamente en las exportaciones y la estabilidad del empleo.
A nivel anual, el IOAE señala un aumento del 2.6%, la menor variación en los últimos 21 meses, rompiendo una racha de siete meses consecutivos por encima del 3.0%.
