La crisis en el sector cafetalero de El Salvador persiste, ya que los caficultores continúan vendiendo sus fincas debido a la combinación de una baja productividad y la caída de precios.
La Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal) informa que las ventas se concentran en propiedades ubicadas a lo largo de las carreteras, muchas de las cuales se destinan ahora a proyectos turísticos.
El presidente de Acafesal, Sergio Ticas, destaca varios desafíos, incluido el cambio generacional en la administración de las fincas, ya que los jóvenes prefieren trabajos más estables.
Aunque se defiende que algunas fincas se destinan a proyectos turísticos, testimonios de caficultores sugieren que algunas se venden para fines residenciales o para la siembra de caña.
Además, el informe del Instituto Salvadoreño del Café revela una disminución en la deuda del sector, atribuida en parte a la venta de inmuebles.
A pesar de estos desafíos, el sector destaca la importancia del café para la generación de empleo y la contribución al medio ambiente.
