Francia implementará un sistema de evaluación de la huella contaminante de las prendas de vestir, similar al conocido Nutriscore para alimentos, a partir de este otoño. Este nuevo “ecoscore de las ropas” se aplicará inicialmente de manera voluntaria, con la posibilidad de volverse obligatorio en 2025, según anunció el Ministerio de Transición Ecológica.

El objetivo de este sistema es concienciar a los consumidores sobre la sostenibilidad de las prendas que adquieren. El sector textil representa una parte significativa de las emisiones de carbono a nivel mundial, y el gobierno francés busca abordar este problema alentando la compra de ropas más respetuosas con el medio ambiente.

El “ecoscore” de las ropas considerará las emisiones asociadas a la producción y distribución de una prenda, así como la contaminación del agua durante su fabricación, y la durabilidad de los materiales utilizados para reducir el consumo impulsivo y fomentar la reutilización.

Se espera que este sistema motive a los consumidores a optar por productos con una menor huella ambiental, contribuyendo así a la lucha contra el cambio climático y promoviendo prácticas más sostenibles en la industria textil.