Domingo 1 de diciembre de 2024
Google firmó el lunes un acuerdo para adquirir electricidad de pequeños reactores nucleares, con el fin de contribuir al suministro de energía para sus operaciones de inteligencia artificial (IA). Este acuerdo, establecido con la empresa Kairos Power, se produce semanas después de que se anunciara que la planta de Three Mile Island, conocida por haber sido escenario del peor accidente nuclear en Estados Unidos, retomará sus operaciones para abastecer de energía a Microsoft.
Michael Terrell, director de Energía y Clima de Google, declaró en una rueda de prensa: “Creemos que la energía nuclear puede desempeñar un papel clave en nuestro crecimiento sostenible y en el desarrollo de la IA”. Sin embargo, no se proporcionaron detalles financieros del acuerdo.
Empresas tecnológicas como Microsoft, Amazon y Google están expandiendo rápidamente sus centros de datos para hacer frente a la creciente demanda de capacidad informática impulsada por la IA, mientras buscan fuentes de energía en todo el mundo.
Se prevé que el primero de una serie de pequeños reactores modulares (SMR), desarrollados por Kairos Power como parte de su colaboración con Google, comience a operar hacia finales de esta década. Además, otros reactores pequeños entrarían en funcionamiento antes de 2035, generando un total combinado de 500 megavatios.
Los SMR son más compactos y podrían ser más fáciles de implementar que las plantas nucleares tradicionales. No obstante, esta tecnología aún se encuentra en etapas iniciales y carece de aprobación regulatoria completa, lo que lleva a las empresas a optar por otras fuentes nucleares ya disponibles.
La energía nuclear, considerada una fuente más constante que la solar o la eólica, es vista por muchas empresas tecnológicas como una opción para satisfacer la creciente demanda energética de la IA.
Por su parte, Microsoft utilizará la energía nuclear de Three Mile Island para fortalecer una red eléctrica que abastece a 13 estados de Estados Unidos. Esta zona enfrenta grandes presiones debido al elevado consumo energético de los centros de datos, lo que genera preocupaciones sobre la estabilidad de la red con el aumento de la demanda impulsada por la IA.
Sin embargo, la energía nuclear tiene detractores debido a las preocupaciones sobre la gestión de residuos radiactivos, los riesgos de accidentes graves y los altos costos asociados con la construcción y el desmantelamiento de las plantas nucleares.