Redacción ||
Honduras ha depositado el instrumento de adhesión al CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, también conocido como Corporación Andina de Fomento, ante la Secretaría General del organismo financiero regional, a pesar de que el acta de ratificación no fue aprobada por el Parlamento hondureño. Aunque el acuerdo de adhesión entre Honduras y el CAF fue firmado en julio de 2022, la ratificación parlamentaria no tuvo lugar. La embajadora hondureña en Venezuela, Scarleth Romero, entregó el convenio de incorporación a Alejandra Claros, secretaria general del CAF, marcando el ingreso de Honduras como “miembro pleno”.
Aunque la adhesión de Honduras al CAF fue publicada en el diario La Gaceta en julio, el Parlamento hondureño no ratificó el acta de incorporación, a pesar de que había sido aprobada en mayo con 66 votos de los 128 diputados. Sin embargo, algunos líderes de bancada argumentaron que aprobar el acta implicaría que Honduras, que enfrenta dificultades económicas, obtuviera un préstamo inicial de alrededor de $500 millones.
La presidenta hondureña, Xiomara Castro, anunció que Honduras había realizado el primer pago al CAF-Banco de Desarrollo de América Latina a principios de agosto, pero no especificó el monto. Se estima que Honduras deberá pagar alrededor de 11.500 millones de lempiras (equivalentes a $468 millones de dólares o 429 millones de euros) por su incorporación.
Esta acción ha generado controversia en el país, con un grupo de diputados opositores presentando una denuncia contra tres directivos del Parlamento hondureño, incluido su titular, Luis Redondo, y los secretarios del Parlamento, por la publicación oficial de la adhesión de Honduras al CAF-Banco de Desarrollo de América Latina. La situación pone de manifiesto la tensión entre el Ejecutivo y el Legislativo en relación a esta adhesión al organismo financiero regional.
