En la apertura de la XIII Conferencia Ministerial en Abu Dabi, la directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, emitió una alerta sobre la situación global, describiéndola como “más difícil” y llamando a reformar y revitalizar el organismo internacional.
Okonjo-Iweala destacó que, si bien el mundo enfrentaba desafíos importantes a mediados de mayo de 2022, con la salida gradual de la pandemia y la guerra en Ucrania impactando la seguridad alimentaria y energética, la situación actual es aún más complicada.
“La incertidumbre y la inestabilidad están por todas partes. Las tensiones políticas han empeorado. Los conflictos se han extendido, como vemos aquí en Oriente Medio y lejos de los titulares, por partes de África y el mundo árabe”, afirmó la directora de la OMC.
Okonjo-Iweala también señaló el aumento de los precios de alimentos, energía y otros productos básicos, que están afectando el poder adquisitivo de la población, así como las interrupciones en el transporte marítimo en vías navegables vitales como el mar Rojo y el canal de Panamá.
Ante esta realidad, Okonjo-Iweala subrayó la necesidad de fortalecer la OMC para que pueda abordar los desafíos actuales y futuros del comercio mundial.
“Tenemos que seguir reformando y revitalizando la OMC para que pueda aportar resultados al comercio en los próximos años, aprovechando todo el potencial de los servicios y el comercio digital, acelerando el comercio para la transición ecológica y fomentando la inclusión socioeconómica”, afirmó.
En un año marcado por elecciones en muchos países, incluidos Estados Unidos y el Reino Unido, la directora general de la OMC destacó la importancia de abordar las preocupaciones de la población y trabajar en pro de un comercio mundial más inclusivo y sostenible.
