La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó hoy que los altos precios de la energía son una desventaja competitiva para la Unión Europea y que uno de los principales objetivos de su próxima administración será lograr una disminución “estructural” de estos precios. Durante una rueda de prensa centrada en la infraestructura energética de Ucrania, Von der Leyen destacó que el costo de la energía en Europa es notablemente superior al de otras regiones del mundo.
Para abordar esta situación, propuso diversificar los proveedores, realizar inversiones masivas en fuentes de electricidad renovables y de baja en carbono, como la energía nuclear, así como mejorar la eficiencia energética.
En cuanto a la situación de Ucrania, Von der Leyen subrayó la importancia de que Bruselas continúe apoyando energéticamente al país en su defensa contra Rusia. Anunció un plan para satisfacer el 25% de las necesidades energéticas de Ucrania este invierno, dada una brecha de 70 gigavatios (GW). El plan incluye 160 millones de euros en ayudas que discutirá con el presidente ucraniano, Vlodómir Zelenski, en una visita a Kiev.
Además, la CE se comprometió a contribuir a la reparación de 2,5 GW de capacidad energética y a seguir exportando electricidad a Ucrania para compensar la pérdida de generación tras el ataque a la central de Zaporiyia el 26 de agosto, que dañó gran parte de la infraestructura energética del país.
El director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), Fatih Birol, enfatizó que la situación energética de Ucrania es “muy frágil”, especialmente con la llegada del invierno, y destacó la necesidad de estabilizar la infraestructura energética mediante soluciones como la instalación de paneles fotovoltaicos, que son más fáciles de reparar y menos vulnerables a ataques en comparación con las grandes centrales. Bruselas ha aportado hasta ahora más de 2.000 millones de euros en apoyo financiero energético desde el inicio del conflicto.