En noviembre, los precios mundiales de los alimentos se mantuvieron estables después de tres meses consecutivos de descenso, según informó la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). El índice de precios de los alimentos, que evalúa el cambio en los precios internacionales de una canasta de productos básicos, registró un promedio de 120.4 puntos, sin variaciones con respecto al mes anterior, pero con una disminución del 10.7 % en comparación con noviembre de 2022.
En noviembre, los precios de los aceites vegetales aumentaron un 3.4 % después de tres meses de descensos, mientras que los productos lácteos registraron un aumento del 2.2 %. El índice de precios del azúcar también experimentó un incremento del 1.4 %, siendo un 41 % más alto que en el mismo período del año anterior.
La FAO atribuye el aumento de los precios del azúcar a “una mayor preocupación por los suministros mundiales de exportación en vista del deterioro de las perspectivas de producción” en Tailandia e India. Por otro lado, los precios de cereales disminuyeron en un 3 %, afectados por los precios del maíz, consecuencia de grandes ventas de agricultores argentinos y el inicio de la cosecha en Estados Unidos.
En cuanto a la carne, el índice cayó un 0.4 %, principalmente debido al descenso de los precios de las aves de corral, cerdo y ternera. La FAO destaca que la caída de los precios internacionales de la carne de aves de corral se explica por una oferta abundante, principalmente de Brasil, a pesar de las dificultades con la gripe aviar en muchos países.
Además, la FAO elevó ligeramente su previsión de producción mundial de cereales en 2023 en un 0.9 %, alcanzando los 2,823 millones de toneladas.