Jueves 12 de diciembre de 2024
La multinacional británica de productos de higiene y alimentación Unilever ha anunciado este martes su intención de recortar aproximadamente 7.500 puestos de trabajo en todo el mundo como parte de un plan de reforma destinado a ahorrar alrededor de 684 millones de libras (unos 800 millones de euros) en los próximos tres años.
Estos recortes se llevarán a cabo principalmente en las oficinas de la compañía como parte de un extenso programa de reestructuración dirigido por su nuevo CEO, Hein Schumacher, con el objetivo de mejorar el desempeño del grupo.
Unilever, conocida por marcas como Dove, tiene su sede central en Londres y cuenta con alrededor de 6.000 empleados en el Reino Unido, formando parte de una fuerza laboral global de 128.000 personas.
El CEO de la empresa, quien asumió el cargo el año pasado, calificó los resultados financieros del grupo para el año 2023 como “decepcionantes”. Con el plan de reforma, la compañía planea invertir en tecnología para aumentar la productividad y reducir costes.
“Como parte de nuestro plan de crecimiento, nos hemos comprometido a hacer menos cosas pero mejor y con un mayor impacto”, señaló Schumacher, agregando que los cambios anunciados acelerarán este plan.
Unilever aseguró que llevará a cabo estos recortes de empleo en consulta con los representantes de los trabajadores y con el debido respeto y consideración hacia aquellos empleados que se verán afectados por esta medida.