Venezuela ha otorgado una licencia a la compañía energética Shell y a la Compañía Nacional de Gas (NGC) de Trinidad y Tobago para llevar a cabo la producción de gas natural en el yacimiento Dragón, ubicado frente a la costa venezolana. El acuerdo, que incluye la participación de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), tiene una duración de 30 años y marca un hito significativo para ambas naciones.
El yacimiento Dragón, con una reserva de 120 millones de metros cúbicos de gas, se encuentra al noreste de Venezuela, cerca de la frontera marítima con Trinidad y Tobago. Este proyecto conjunto implica la cooperación entre PDVSA, NGC, y la multinacional británica Shell para la producción y exportación de gas, representando la primera vez que Venezuela participa en la exportación de este recurso.
El ministro de Energía de Trinidad y Tobago, Stuart Young, expresó su satisfacción por la obtención de la licencia, describiendo el día como “un gran día tanto para Venezuela como para Trinidad y Tobago”. Agradeció la licencia para la producción de gas en el campo Dragón y destacó la importancia del acuerdo para ambas naciones.
La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, celebró la firma del acuerdo y resaltó que este proyecto permitirá a Venezuela producir y exportar gas por primera vez. El campo Dragón se encuentra adyacente a campos operados por Shell en Trinidad y Tobago, lo que facilitará la colaboración entre las compañías.
Este acontecimiento se produce en un contexto de alivio de las sanciones impuestas por Estados Unidos, permitiendo la reactivación de operaciones para diversas empresas internacionales en Venezuela. La flexibilización del embargo petrolero en octubre de 2023 ha propiciado acuerdos como el firmado entre PDVSA y la petroquímica española Repsol, así como la reanudación de actividades por parte de la petrolera francesa Maurel & Prom en noviembre de este año.
La firma de la licencia para la producción de gas en el campo Dragón representa un paso significativo para Venezuela en el impulso de su sector energético y busca contribuir al aumento progresivo de la producción de crudo en el país, que se espera alcance los 900,000 barriles diarios a principios de 2024, superando el millón de barriles a lo largo del año.
