Wall Street registró uno de sus trimestres más rentables en la historia reciente, impulsado por un repunte en las operaciones financieras, el dinamismo del consumo y una economía global que ha mostrado resiliencia frente a los aranceles y las tensiones geopolíticas.

De acuerdo con los reportes de ganancias, JPMorgan Chase, Citigroup, Wells Fargo y Goldman Sachs registraron incrementos de dos dígitos en sus beneficios durante el último trimestre. Sin embargo, los principales ejecutivos de estas entidades mostraron cautela ante los riesgos de inflación y activos sobrevalorados.

“Si bien ha habido algunos signos de debilitamiento, particularmente en el crecimiento del empleo, la economía de Estados Unidos en general se mantiene resiliente”, señaló Jamie Dimon, presidente y CEO de JPMorgan Chase. “No obstante, persiste un alto grado de incertidumbre derivado de las condiciones geopolíticas, los aranceles y el riesgo de una inflación persistente”, agregó.

JPMorgan Chase reportó una ganancia neta de $14,390 millones, equivalente a $5.07 por acción, un aumento del 12 % interanual. Wells Fargo obtuvo $5,590 millones (un alza del 9 %), Citigroup ganó $3,750 millones (16 % más) y Goldman Sachs destacó con un incremento del 37 %, alcanzando $4,100 millones.

El desempeño de JPMorgan estuvo impulsado por su división de banca de consumo, gracias al crecimiento del uso de tarjetas de crédito y a la actualización de su Chase Sapphire Reserve, que incentivó mayores gastos entre los clientes.

Asimismo, el auge de las ofertas públicas iniciales (OPI) y las fusiones y adquisiciones impulsó las ganancias por banca de inversión. En Goldman Sachs, los ingresos de esta división aumentaron un 42 %, mientras que las comisiones subieron un 27 %. Silicon Valley, con sus empresas de inteligencia artificial, también contribuyó a la actividad de inversión con miles de millones destinados a la expansión de centros de datos.

No obstante, los líderes financieros coincidieron en que el panorama sigue siendo incierto. Los metales preciosos, como el oro y la plata, alcanzaron precios récord —una señal de búsqueda de refugio por parte de los inversores—, mientras que la guerra comercial entre Estados Unidos y China continúa amenazando las cadenas de suministro globales.

“Persiste mucha incertidumbre en torno a los aranceles, la inflación y su posible impacto en el mercado laboral”, advirtió Mark Mason, director financiero de Citigroup.